Les presentamos este ático con vistas y gran terraza en la mejor parte del Eixample, la Antigua Esquerra de l’Eixample. Unos 149m2 de vivienda (según catastro) más 20m2 de terraza en una novena planta de un edificio clásico del 1900 con ascensor y con la ITE al día. La vivienda dispone de una excepcional luminosidad y vistas desde todas las estancias sobre Barcelona ya que es exterior hacia tres vientos sin edificios vecinos a su altura. El salón de más de 30m2 se abre con dos amplios ventanales a la terraza, orientada a mar y con vistas panorámicas desde las torres del Puerto Olímpico hasta Montjuic. El recibidor es una espaciosa y luminosa estancia más; dispone de dos ventanas y es usado como despacho. Desde este se accede a la gran cocina, completamente equipada y con espacio para una buena mesa de dimensión familiar. Hacia el pasillo de la zona de noche nos encontramos primero un aseo de cortesía, seguido por un cuarto de aguas con caldera y lavadora. El primero de los tres dormitorios dobles es la habitación principal con armarios empotrados y un cómodo baño en suite con una espaciosa ducha “walk-in”. Siguiendo el pasillo encontramos el segundo baño completo, igual como el anterior de cuatro piezas. Al final llegamos a dos dormitorios dobles y exteriores, orientados a noroeste hacia el interior de la manzana y con vistas hasta Collserola. La práctica distribución se completa con un vestidor independiente muy útil.

La reforma de hace 15 años se hizo con un excelente nivel de calidad y mucho gusto. Preciosos techos artesonados con los rieles de cortinas integrados, luces empotradas y la distribución del aire acondicionado (frío y calor) por conductos elegantemente disimulada. Suelos de parquet macizo en todas las estancias, travertino en los baños (también aquí de revestimiento) y cerámicos en la cocina. Calefacción a gas con radiadores, carpintería exterior de aluminio con doble acristalado y algunas lunas de cristal satinadas y artesonadas, entre muchos otros detalles, son testigos del mimo que se le otorgó a esta reforma. El piso está muy bien cuidado, para entrar a vivir con algunas actualizaciones según su exigencia y preferencia.

La elegancia del barrio de la Antiga Esquerra de l’Eixample se plasma en la suntuosa fachada del edificio del 1900. La ubicación, más céntrica y mejor comunicada imposible, ofrece todo lo que se pueda desear en nuestra gran metrópolis. Si busca un estilo de vida cómodo y urbano, con elegancia y calidad de vida, ¡esta es la propiedad que se lo brinda todo!

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